14.11.15

DÍA 14:Sábado
La ley del “dharma”.

El universo siempre te está enviando mensajes que te dicen si estás en tu dharma o si te has desviado. Cuando estás viviendo conforme a tu verdadero propósito, los acontecimientos parecen conspirar a tu favor y te resulta fácil avanzar.  

“Toma tu té lentamente y con respeto, como si esta actividad fuera el eje sobre el que gira la toda la tierra. Vive el momento. Sólo que este momento real es la vida”. –Thich Nhat Hanh

Percepción del momento presente
¿En qué está concentrada tu mente en este momento? ¿Estás pensando en algo que ocurrió antes o en tus planes o acontecimientos futuros?
La mayoría del tiempo nuestra mente está inmersa en el pasado o proyectándose hacia el futuro. Es raro que todo nuestro ser se deje llevar por el momento presente... el aquí y el ahora, que delicadamente se encuentra entre nuestras experiencias pasadas y sueños futuros.
Sólo por este momento, trae tu atención a la belleza, riqueza, y santificación del presente sagrado. Cierra los ojos, inhala y exhala: Mientras tu mente se deja llevar por sucesos del pasado o divaga con pensamientos sobre el futuro, poco a poco regresa a tu respiración. Con cada inhalación y cada exhalación regresa al presente. Deja de leer estas palabras y haz el intento por unos momentos.
Con la ayuda de las herramientas para crear conciencia, que son la percepción, la meditación, el yoga, y la intención de estar presente en cada momento, puedes explorar aún más las posibilidades.

¿Cómo se sentiría estar completamente conectado con el espíritu en cada momento? Sin revivir el pasado ni proyectarte hacia el futuro sino simplemente dejándote ser... respira por respirar. Dulcemente presente en todo aquello que el universo haya planeado

Lo que yo entiendo de esto:

Todo escuchamos alguna vez que hay que vivir el presente, pero realmente muchas veces nos dejamos llevar por el miedo hacia el futuro, nos pasamos la vida preocupados por ¿Qué vamos a hacer?, ¿Las cosas cambiaran?,¿Podremos hacer todo lo que queremos y soñamos?, ¿De qué vamos a vivir en determinado tiempo?, etc., y esta clase de pensamientos, esta preocupación hacia el futuro solo genera ansiedad, estrés y en ocasiones hasta depresión, si por el contrario, tememos el pasado, vivimos guardando rencores y malas experiencias solo vivimos envenenándonos solos por así decirnos porque esa clase de sentimientos no hacen nada bueno en nuestra vida, son un muro que nos impide ver las cosas buenas de nuestra vida y nos impide tener felicidad, por lo tanto, lo más viable es vivir el presente, es el único momento seguro, disfruta el día de hoy, agradece por vivirlo, por poder tomar decisiones hoy, poder disfrutarlo, poder hacer cualquier cosa, el presente es el tiempo más valioso.

Receta:


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